10 may 2008

Comiendo criollo en España

La comida venezolana no es tan famosa como puede ser la italiana o la peruana, ni llega a ser tan exótica como la de la India o el sushi, pero eso no le quita lo sabrosa que es. La variedad de platos no es muy grande pero de ellos se derivan muchos más, como el caso de la arepa, que su elaboración es sencilla y única pero el relleno es infinito. Aunque también es cierto que cada región tiene un plato típico y yo no los he probado todos.

La cosa está en que una vez instalado en Pamplona, luego de un par de semanas, comienzo a tener ganas de comerme una arepita. Esto es curioso porque en mi casa nunca hacemos ya que somos peruanos, por lo que sólo se preparaban cuando yo las hacía: una vez cada cinco años. Pero claro, uno siempre termina yendo a casa de otra persona donde te ofrecen tu arepita o vas a una de las tanta areperas 24 horas y la pides del relleno que quieras.

En fin, la cuestión está en que al fondo de un anaquel inferior de un supermercado veo cuatro paquetes de harina P.A.N. (indispensable para hacer las arepas) y me agarro esas cuatro porque temía que más nunca iba a encontrar otra vez. Luego me doy cuenta que se consigue fácilmente, y acá en Madrid casi que en cada esquina.

Bueno, desde ese momento, comenzamos hacer arepas todos los domingos en el consulado venezolano de Pamplona. Invitábamos a la gente de poco en poco para que fueran probando el plato típico de Venezuela y a todo el mundo le encantaba y quería volver. Pero tenían que reservar con un mes de antelación, normas del consulado.

Acá en Madrid ya comencé a conocer a más venezolanos y cada cierto tiempo nos reunimos pero ya para hacer, no sólo arepadas, sino empanadadas y cachapadas. El nuevo reto planteado es hacer pabellón criollo y me imagino que luego será un asado negro... ya son palabras mayores!

También he conocido algunos restaurantes venezolanos que no es lo mejorcito pero es lo que hay. Y para navidad organicé una cena venezolana en La Alhambra, con todos los platos típicos para la época como la hallaca, la ensalada de gallina, el pan de jamón, etc. Además de los jugos que tanta falta hacían como el de lechosa! Esa noche fue muy buena, luego vino el postre (quesillo, bienmesabe, etc) y por último una echada de pie antes de salir a rumbear por ahí.

Comiendo criollo en todos lados

Ya para terminar les comento que encontré una página web (Open Source Food) donde la gente deja sus comidas y cómo se hacen, me di cuenta que no había nada venezolano y ya me he puesto a pasar algunas para darlas a conocer. En las barras del lado derecho puse un link (De hambre no me muero) para que puedan ir directo a las que pongo yo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicitaciones Luismi. Veo que no sólo te has vuelto un experto chef sino que también eres un buen organizador y mantienes unido al grupo de venezolanos que conoces allá en Madrid.
Me haces recordar cuando llegué a Caracas hace ya casi 30 años, No sabía ni freír un huevo y ahora me defiendo con algunas especialidades y, por lo tanto.... de hambre no me muero, tal como se llama el link que mencionas.

Anónimo dijo...

chamo ahi en la nevera todavia hay un paquete de harina pan, desde cuando estara ahi jajajaja

Anónimo dijo...

Espero que igas escribiendo asi me gusta tu estilo

Anónimo dijo...

primo... me dio hambre leer eso... será que de España me puedes mandar un kilito de harina P.A.N porque aqui no hay jjejejeje y las ganas de comer arepa son enormes, aqui hay unos cuantos restaurantes vnezolanos pero esas arepas nada que ver, as cachapas si son buenas!
Besos!!